sábado, 6 de noviembre de 2010

LA NIÑA DE LOS OJOS CIELO

La niña de los ojos cielo no es una niña
La niña de los ojos cielo pasea cabizbaja
Mirando de reojo cuando te cruzas con ella
Pasea flanqueada por una gitana de pelo negro
Que juega a las máquinas tragaperras
Es su madre
Al otro lado un gitano gordo con la cara marcada
Los ojos desencajados por el exceso de sustancias volátiles
Es su padre
La niña de los ojos cielo siempre va con ellos
La niña de los ojos cielo nunca sonríe
Sólo cuando su madre consigue sacar tres euros de la máquina tragaperras
La niña cielo no va al colegio
Porque ya lo conoce todo
Conoce que hay después de todo esto
Conoce que se oculta en el centro de la tierra
Y también conoce quién mató a su tío
La niña cielo es bruja, y cuando te mira a los ojos descubre tu futuro
Tu pasado
Y tu presente
Por eso sonríe cuando a su madre le toca un premio en la máquina tragaperras
Por ella ya lo sabía
La niña cielo es inmensa
Cuando camina es como un desierto gigante y solitario
Con dunas de cristal
Y palmeras de espejo
Un oasis de tiempo detenido en todos los instantes
Ondea el viento a su antojo
Y su coleta es la bandera de lo infinito
Nunca he oído la voz de la niña cielo
Pero la imagino como el canto de la tierra
Profunda, salvaje, herida
Una voz que canta nanas a los tigres en peligro de extinción
Y insulta a los cimientos de todo lo que ve pero le es ajeno
Hoy la he visto a través del cristal de un bar y ha sonreído
Justo en el momento flotante en el que mis ojos de hierro
Se cruzaban con su ojos cielo
He soñado que esa sonrisa era para mi
La he guardado en el bolsillo de mi memoria
Pero al instante he oído el sonido de las monedas al caer en la bandeja de la máquina tragaperras
A su madre le había tocado premio.

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